En este año de 2013, y en particular en esta segunda parte del año se han venido haciendo grandes esfuerzos para resignificar nuestro P.E.I. desde cada una de las áreas de gestión y sus componentes. En este proceso ha sido valiosa la amplia participación de muchos miembros de cada uno de los estamentos de la comunidad educativa bajo el liderazgo de cada una de las instancias del gobierno escolar.
El Plan Estratégico de Transformación Escolar Federiquiano (Proceso de gestión institucional de la educación) se constituye en un espacio relevante para la I.E.F.A. porque define, a mediano y corto plazos, el rumbo que nuestra institución deberá asumir para lograr las metas institucionales. Expresa el compromiso de la comunidad educativa para generar prácticas que sirvan para concentrarse en las acciones que aseguren el mejoramiento permanente del ambiente federiquiano, de la seguridad colectiva y sobre todo del aprendizaje permanente.
Este proceso de gestión es una herramienta esencial, su elaboración, ejecución, seguimiento y evaluación integra todas aquellas áreas, objeto de la transformación institucional, de tal manera que el liderazgo compartido, el trabajo colaborativo, la corresponsabilidad en la participación social, se concretan en las diferentes acciones que la I.E.F.A. ha emprendido para mejorar su gestión escolar.
La gestión educativa constituye un medio fundamental para generar rumbo, identificar prioridades y asegurar el logro de propósitos, objetivos y metas, prioriza lo sustantivo; es decir, aquello que no puede dejar de atenderse para asegurar los resultados esperados, en general. Para impulsar el mejoramiento continuo se han establecido indicadores de Gestión, referentes a los que el colectivo deberá atender en el nivel de la I.E.F.A. y del aula para asegurar los aprendizajes de todos los estudiantes Federiquianos, además, favorecen la certidumbre de los resultados de la autoevaluación porque permiten contrastar la realidad escolar y el escenario deseable que plantean; es decir, el deber ser.
Entre el punto de partida (situación actual de la I.E.F.A.) y el de llegada (visión a la que se aspiramos) está siendo necesario diseñar, ejecutar, acompañar, evaluar y dar seguimiento a la evaluación de varios planes a mediano plazo, lo que dependerá de la situación contextualizada de nuestra institución. A partir de la autoevaluación, la información obtenida se puede organizar en las cuatro áreas gestión educativa: “directiva, académica, administrativa y financiera, de la comunidad”,para realizar un cálculo estratégico de la situación que permita identificar qué tan lejos o cerca nos encontramos de alcanzar los estándares o indicadores de gestión, los cuales aportarán los insumos para la construcción de la visión de futuro
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