Cuando Era Niño…

Cuando era niño solo imaginaba jugar y disfrutar cada segundo de mi vida y la alegría con la que vivía, construía en un minuto, predecía cosas, ilusionaba más allá de los sueños, participaba de foros sociales no virtuales, pasaba por la telaraña de soga, tomaba largas horas de sol sin temor al cáncer de piel, chateaba con mis amigos reales en la sala virtual del campo verde, era una vida más activa y afectiva, crecí viendo a los superhéroes ganar batallas y avanzar murallas,  orando y dando alabanzas de fe, iba al estadio con boletas de comfamiliar camacol a lo que hoy le llaman el espacio de los del sur y la resistencia norte, e incluso a la tribuna lateral sur ya desaparecida en el estadio Atanasio Girardot, comía mango con sal y limón y no experimentaba las severas gastritis de hoy en día, vive en casas que no tenían los espacios tan marcados y definidos como ahora, la tecnología era el atari 2600 y el nintentdo que luego fue súper, la voz de Colombia nació y creció conmigo, desempolvaba los viejitos en la mañana de mamá.

Mi tetero era de vidrio y la chupa café, la bicicleta y los patines servían para desplazar los mejores momentos de mi niñez. Cuando era niño lucía las botas machitas que almacenaban el olor de caucho, causaban éxtasis las fiestas de garaje y las baladas de Air suplay, la salsa de los charcos y las gaitas de billos, sábados felices hizo del humor un país más relajado a la hora de las dificultades, las hojas de los cuadernos se respetaban y no se arrancaban abismalmente, además por que eran tan amarillas que quizás era el color que enrostrábamos a la hora del regaño y compaginábamos el sentimiento del regaño familiar. Ir a estudiar, gran ritual de convivencia, respeto y valor por aprender y superar a los compañeritos de curso, de primero a segundo de primaria y luego a primero de bachillerato era el camino para sembrar la realidad del hoy, soñaba con ser bombero o policía, jugador profesional de fútbol en ese entonces no era tan importante por que la paga no era como hoy, soñaba aliviar enfermedades y celebrar misas, creía en un mañana mejor, vivía por gozar la vida y no que la vida me gozara, cuando era niño despertaba con la carabina de Ambrosio y animalandia los domingos.

La tele era de antena y para mejorar la alta definición de la época había que magnetizar la señal.

Cuando era niño la mujer maravilla deslumbraba con su atuendo y su cara divina, veía concéntrese para quizás algún día hacer parte de esa realidad del juego televisivo, los reinados hacía parte de una hoja de libro escrita con tinte familiar.

Leía los líderes de la época y el ejemplo que nos dejaban con sus escritos, muchos de ellos asesinados por su ideología y temor de quienes tenían el poder y el miedo a relegarles del subyugo directivo de la época.

Me acuerdo de Marujita la profe de primero que en paz descanse y me enseño a comportarme y decir mis primeras palabras, al igual que Ana lucía, el padre Javier con la dinámica y la energía del juego y doña Lenny que me promovió a la secundaria con la convicción de que entraba a la pubertad, y de ahí a dejar de ser niño en edad pero nunca en mentalidad.

Cuando era niño veía el más allá tan cerca como cuando hoy lo veo distante de una niñez que evidencia la realidad de crecer. Cuando era niño soñaba en ser alguien, y creo que no me equivoque… Por eso recuerden cuando eran niños, y disfruten de las letras y el recuerdo.

OSCAR ALEJANDRO RINCÓN CARVAJAL

EDUCADOR FÍSICO IEFA PERIODISTA ACORD 035