Interesante convocatoria hace el Parque Explora con motivo de la inauguración de nuevos auditorios. En esta oportunidad nos trae una interesante dualidad: Ilusionismo y neurociencias. -El ilusionismo ha pasado de ser un poder oculto a un modelo para la ciencia moderna. Los proscritos magos que durante siglos han jugado con nuestras mentes se sentirán muy satisfechos al saber que sus técnicas son utilizadas ahora para desentrañar cómo nuestra mente percibe lo que ve.
El cerebro construye nuestra experiencia consciente. Se da una conexión con los magos porque ellos saben manipular la conciencia y la atención del espectador y llevan años perfeccionando sus técnicas, mientras que el estudio de la conciencia es un campo muy incipiente que sólo se ha estudiado en las últimas dos décadas. Antes no se consideraba serio. El uso de técnicas de ilusionismo mejora el diseño de experimentos de neurociencia cognitiva. Los ilusionistas utilizan claves sociales para desviar la atención. Así, si el mago mira un objeto con intensidad consigue que el público se centre en éste y no en él. Y, al revés, si mira fijamente al público, logrará que se distraigan de lo que manipula.
A pesar de que el ser humano es capaz de alcanzar metas inimaginables gracias a su capacidad intelectual, nuestro cerebro también tiene sus limitaciones.
Los seres humanos tenemos una capacidad neuronal limitada. Nuestro cerebro debe tomar atajos e interpretar la realidad resaltando algunos aspectos y desestimando otros.
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