Se desarrollaron las actividades propuestas para el día de la convivencia escolar, las cuales se llevaron a cabo el pasado 15 de septiembre. La jornada fue una oportunidad para el encuentro y la reflexión en torno a lo que es estar y vivir en un mismo espacio con otros, comprendiendo que el hecho de coexistir trae consigo momentos de cercanía y momentos de distanciamiento; en el caso de la IEFA no se pretende que prime el uno o el otro, es comprender que ambos existen y son parte importante en nuestras vidas; sin embargo deseamos resaltar la importancia de excluir en cualquier campo las actitudes o acciones violentas o que atenten contra la dignidad de quienes compartimos este espacio.
Como orientación para este año 2017 el comité de convivencia construyó los imaginarios desde el SANAR, convencidos que el ser humano en sus relaciones hace una proyección de su yo más íntimo y en cada momento de la vida manifestamos nuestro ser como resultante de lo que hemos vivido, así con estas tesis y recogiendo las problemáticas escolares y sus orígenes identificamos que es importante llevar a nuestros jóvenes y niños a experiencias de vida que les permita SANAR, volver a iniciar el camino con los otros, donde es importante perdonar, dejar ir y comprender que muchos momentos de la vida son justamente eso, momentos que corresponden a una situación concreta, pero que no nos determina y no nos puede alejar del propósito que tenemos cada día en la escuela.
Para este día se vivieron dos grandes momentos en la Básica Secundaria: el primer momento fue un encuentro comunitario pensado para fomentar la formación y la reflexión, acompañados por un cuentero y el equipo de orientación escolar. Alejandro Rojas, el cuentero acompañante de la jornada, es Biologo y actualmente estudiante de maestría de la U. Nacional en enseñanza de las Ciencias Naturalez y exactas. Fue tallerista varios años del Parque Explora y cuentero desde hace unos 20 años, en su presentación uso cuentos Argentinos y Brasileños.
- El segundo momento se desarrolló en los salones de clase con los directores de grupo: se dispuso de tres
Alejandro Rojas, cuentero actividades de aula:
- Experiencia de vida: circulo de paz
- Integración comunitaria: se propone que los grupos tengan un momento para compartir un alimento o dulce, que le propicie desde lo informal, pero muy organizados, la intencionalidad del encuentro sanador de sus integrantes
- Talentos: este es un espacio para que al interior de los grupos se diera una muestra de aquellos gustos, hobbies o talentos que hemos cultivado, desarrollado y fortalecido en nuestra vida escolar y familiar. Esperamos una buena motivación y organización para este punto.
En la Básica primaria el primer momento estuvo animado por el grupo de teatro Polichilena
Circulo de Paz:
Taller del día de la convivencia: círculos de paz, una forma de Sanar
El siguiente taller es una propuesta fundamentada en las estrategias de la Justicia restaurativa, como orientación institucional a los procesos de mediación escolar que se pretenden fortalecer al interior de nuestra comunidad educativa.
Objetivo: Crear ambientes de escucha en el grupo, a través de espacios de dialogo que nos permita acercarnos y generar lazos de confianza. A partir de allí, iniciar un proceso para pensar nuestra convivencia y establecer compromisos que nos permitan mejorarla.
Materiales:
Un tótem u objeto de la palabra por subgrupo: (objetos como, celulares, pelota, peluches, u otro objeto)
Un tapete: puede usarse un individual, carpeta o estera pequeña que debe estar en el centro del grupo.
Material para la cartelera (papel craff, marcadores o lo que cada grupo disponga para tal fin)
ETAPAS:
- Encuadre: Construyendo confianza.
Esta metodología nos lleva a construir un espacio ritual especial, con ambiente apropiado para escuchar y sanar; de antemano se debe tener en cuenta que es una herramienta muy útil para dicho fin, pero necesita de tiempo de desarrollo.
Para ello se tendrá en cuenta algunos valores y condiciones: El respeto por la palabra, la escucha y el hablar a título personal.
Vamos a iniciar un trabajo por pequeños grupos, de 8 a 10 participantes. Cada pequeño subgrupo debe ubicarse en un espacio específico y realizar un pequeño círculo sin espacios entre los miembros del subgrupo.
En cada subgrupo se delegará un moderador. El ejercicio tiene una parte mecánica simple, cada subgrupo se sentará en el suelo formando un circulo y tendrá un tótem (objeto de la palabra) el cual estará ubicado en el centro del círculo, solo quien tenga el tótem en la mano puede hablar (es decir, responder la pregunta que orienta ese momento) el resto del grupo escuchará. Una de las condiciones es que el tótem se pasará en orden secuencial. El tótem puede ser un objeto significativo y amigable (un peluche, una pelota de espuma, una cajita de madera, un teléfono de juguete, etc.)
Desarrollo del círculo:
Estando ya conformado los subgrupos y organizados, el diálogo, se inicia con una pregunta rompe hielos, como por ejemplo: mencionar un animal, comida o color con el cual te identificas y diciendo el por qué.
Luego se recuerda el tema que nos convoca en la jornada es decir el SANAR: las preguntas que se proponen y que cada orientador de la actividad debe tener en cuenta serán orientadas a esta temática, como:
- ¿Qué es lo que más te gusta de la IEFA?
- ¿Qué me hace venir cada día a la Institución?
- ¿Con que personas me gusta compartir en la Institución?
- ¿Qué cualidades o características tienen las personas que comparten conmigo habitualmente? Sin decir nombres
- ¿Qué tipo de personas me gusta evitar en general? Sin decir nombres
- ¿Qué me hace sentir cómodo en el grupo?
- ¿Qué personas: “nombre” me hace sentir bien en este grupo?
- A quien me gustaría pedirle perdón en el grupo, puede ser de mi equipo o de otro…
- Hay alguien a quien yo quisiera expresarle que me he equivocado con ellos…
Se invita a socializar la actividad, pensado siempre desde lo constructivo y sanador, con palabras, comentarios y expresiones constructivas. En esta socialización se debe hacer uso del tótem para el trabajo con el grupo completo.
Las conclusiones constructivas y sanadoras de la actividad se plasman en una cartelera como unos acuerdos para mejorar la convivencia.
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